Nosotros simplemente nos dejamos llevar por la ruta y por el paisaje. Shimanami Kaido es la puerta de entrada a un Japón más rural, y ya desde la bici te percatas de ello. Los pequeños restaurantes y hoteles, las tiendas, los pueblos pesqueros. Todo desprende un delicioso aroma a autenticidad.
MAR DE SETO
En el curso del Shimanami Kaido está presente en todas partes. No puedes abstraerte de él. Te rodea como una inmensidad azul salpicada de pequeñas islas en el horizonte. Un paisaje sublime. El Mar Interior de Seto queda acotado por la isla de Shikoku al sur y Honshu al norte. Al este el mar de Seto está delimitado por la cadena de islas por las que transcurre el Shimanami Kaido. Desde Honshu a Shikoku dichas islas son : Mukoujima, Innoshima, Ikuchi, Omi, Hakata y Oshima. Y al oeste las Islas de Hiroshima (diferente que la ciudad de Hiroshima), Naoshima, Teshima y Tonosho.
NAOSHIMA
Naoshima es una pequeña isla del Mar de Seto próxima a la costa de Honshu en la linea imaginaria que une las ciudades de Okayama (en Honshu) y Takamatsu (en Shikoku). La isla es famosa por ser cede del Naoshima Art House Proyect
(benesse-artsite.jp), una experiencia artística singular en la que se ha invitado a diferentes artistas ha reformular, con su singular punto de vista, algunas de las viviendas de los habitantes de la isla. El resultado es una isla salpicada de arte. Además la isla cuenta con obras del afamado arquitecto Japonés Tadao Ando. Estos edificios forman una red de museos en cuyo interior se exponen obras de importantes artistas como Monet. Como se trata de una isla pequeña y poco poblada, se puede alquilar una bicicleta para ir buscando las diferentes obras artísticas que salpican toda su superficie, y es posible alojarse en uno de los hoteles-museos diseñados por Tdao Ando. Si te gusta la arquitectura y te gusta el arte puede ser una buena opción para estirar los días de bici.
ONOMICHI:
Onomichi es una ciudad costera de la poco podrás leer en las guías. Su principal atractivo es ser el inicio del Shimanami Kaido (o el final). Dispone de una larga calle comercial que transcurre paralela a la costa. Al ser peatonal y estar techada, te protege del sol en verano y de la lluvia en invierno, y representa un agradable paseo. También hay un teleférico que asciende hacia una de las colinas que la rodean y que te permite disfrutar una bonita vista del mar de Seto y del Shimanami kaido. A partir delas 17:00 está cerrado.
SHIKOKU
Japón está formado por cuatro islas mayores, de las cuales Shikoku es la más pequeña. Se trata de una isla con un diámetro aproximado de 200 kilómetros y una zona central montañosa muy poco poblada. Es famosa por la ruta de peregrinaje de los 88 templos, que viene a ser en Japón lo que el Camino de Santiago en España (aunque mucho menos conocido en el extranjero). Dada su orografía y su densidad de población es ideal para actividades en contacto con la naturaleza. Se le pueden dedicar 4 o 5 días.
IMABARI:
Imabari no es, ni mucho menos, una de las ciudades importantes de Shikoku y, al igual que Onomichi al otro extremo, su principal atractivo es ser el inicio del Shimanami Kaido. Desde lejos parece una ciudad bastante industrial, por las chimeneas que la flanquean y el interior es bastante aséptico y sin alma. Tiene una estación para iniciar tu ruta por Shikoku, si has decidido hacerlo con JR.
MATSUYAMA:
Matsuyama tiene cierto encanto provinciano. Te ofrece el bullicio de una gran urbe sin la majestuosidad de Tokyo. Te puedes mover en tranvía. Sus principales atractivos son el Castillo, en lo alto de una colina a la que se puede subir por un tranvía, y el Onsen más antiguo de Japon, el Dogo Onsen. A parte de ser el más antiguo es famoso por aparecer en la novela Botchan que escribió Soseki Natsume en 1905.
Las fachadas del edificio en todo su perímetro son preciosas y recuerdan a ese tipo de arquitectura tradicional japonesa que todos tenemos en la cabeza. Sin embargo el interior es decadente. Aín así es una experiencia irrenunciable entrar a darte un baño. El mortecino ambiente y el transcurrir de todo tipo de japoneses es fascinante. Incluso a los niños les pareció interesarles. En la fachada principal, junto a la puerta hay una taquilla en la que se especifican los precios. Imposible descifrar las distintas opciones. La básica unicamente da acceso al baño, taquillas y toalla, y otras más complejas te permiten relajarte tomando un té en la planta superior.
El Castillo de Matsuyama está perfectamente conservado (fue restaurado empleando técnicas tradicionales). Corona una pequeña colina que se encuentra en el centro de la urbe por lo que desde sus ventanas se tiene una interesante vista de la ciudad (interesante más que bonita). Puedes caminar por sus grandes salas de madera oscura, ver los trajes y armas de los antiguios samurais. Sujetar una katana y hasta ponerte una armadura de Samurai. Los niños pueden un buen rato.
TAKAMATSU:
La ciudad de Takamatsu está situada al norte de Shikoku y fue nuestra puerta de salida de la isla. Tiene conexión JR con Honshu. Su principal atractivo es el Ritsurin Garden, el Jardín Botánico Ritsurin. Pasear por sus senderos puede llevarte entre una y dos horas. Algunos enclaves son verdaderamente preciosos. Existe la posibilidad de asistir a una ceremonia del té en alguna de las casa del jardín en determinada época del año.
HIROSHIMA:
Nada hay que decir de Hiroshima. Esta ciudad, tristemente conocida, está localizada al sur de la isla de Honshu. Se puede ir desde Onomichi en tren y en ferry desde diferentes puntos del Shimanami Kaido. No se tarda demasiado e incluso es posible ir y volver en el mismo día. Nosotros no lo hicimos pues habíamos leído que su principal atractivo es el Parque Memorial de la Paz y no sentimos ese tipo de interés morboso. Si nos pareció interesante, sin embargo, el modo en que los japoneses han superado la terrible tragedia de la guerra y, probablemente, para llegar a entenderlo, Hiroshima hubiera sido una buena parada.
