Como la idea era empezar en Corfú y terminar en las Cícladas, llevar nuestras bicicletas no era una opción dado que teníamos que hacer 3 escalas. Corfú tampoco nos ofrecía un stock de bicicletas adecuado para nosotros, así que nos decidimos a comprarlas en el Decathlon de Bari e ir hasta Corfú en barco… y fue lo más adecuado. Las bicicletas más básicas de Decathlon no son caras y, aunque la calidad tampoco es excesiva, son lo suficientemente buenas para soportar el viaje. Luego tuvimos algún problemita que pudimos solucionar gracias a la profesionalidad de los griegos y al final, como no había a quién regalárselas en Santorini, donde todo es muy sofisticado para unas bicicletas así, hicimos lo que nunca antes habíamos hecho: nos metimos en una tienda de alquiler de coches y motos y se las ofrecimos. Nos pagaron 50 euros por cada una y todos contentos.
