de Las Palmas
a Logroño

LFGP

El viaje hasta Logroño no tuvo demasiada ciencia. Fue un viaje cómodo. No llevábamos nuestras bicicletas ni nuestras alforjas por lo que se trataba de un viaje sencillo, en avión y en coche, como cualquier otro. Puesto que el grupo estaba compuesto por seis personas de distintas islas del archipiélago Canario, habíamos decidido quedar directamente en Madrid, y en el tiempo en que unos y otros llegaban, los primeros en aterrizar se encargaron de recoger el coche en el mostrador que Europcar tiene en el Aeropuerto Madrid Barajas Adolfo Suárez. No sé a ustedes, pero a mi, siempre que alquilo un coche me siento como un niño con zapatos nuevos. Un modelo desconocido, con todos los perendengues que tienen los coches modernos, comodidades que no tiene tu propio coche. Era un coche grande y nuestras seis maletas (tamaño cabina) cupieron sin dificultad en el maletero, y pueden imaginarse… un viaje de seis personas que hace tiempo que no se ven… pues tuvo que ser, por necesidad, entretenido. Esos viajes en los que hablas no solo de lo ocurrido desde la última vez que te viste, sino de lo que está por venir, de las fantasías que cada uno se ha hecho del viaje que está a punto de comenzar.
El recorrido en coche hasta Logroño duró aproximadamente cuatro horas, a las que hay que añadir el tiempo que nos llevaron las dos paradas que hicimos: una para comer en un Centro Comercial de Guadalajara, junto a la nacional 2, y otra en un Club Ecuestre que encontramos en el camino, para tomar un café y estirar un poco las piernas. No tuvimos problemas para localizar el Hotel Calle Mayor. Se trata de un hotel nuevo, con un diseño moderno muy atractivo pero que resulta un poco frío y vacío. Espacios muy grandes con escasa decoración y muy pocas personas transitando por ellos. Esa sensación desapacible que te anima a gritar para ver si hay eco, pero nada desagradable. Estaba limpio, diseñado y decorado con muy buen gusto, el trato que nos dispensaron los empleados fue muy correcto y… lo mejor… está magníficamente situado en el centro. Nos instalamos, aparcamos el coche en un parking que está a apenas cien metros y salimos a dar un paseo por el centro de la ciudad. Aunque era temprano, era viernes noche y muchos locales de tapas ya estaban completos. Tuvimos que callejear hasta encontrar un lugar de nuestro agrado… pues los recomendados en las páginas web que visitamos ya estaban completos. Cenamos de tapas y nos fuimos pronto a la cama.


>>PASA A LA PÁGINA SIGUIENTE>>

Licencia Creative Commons
Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 España